El presidente Gustavo Petro aprovechó que la atención del mundo está puesta en la COP28, en Dubái, para insistir en dos asuntos que han ocupado su agenda y su discurso en los últimos días: “el genocidio y la barbarie desatada sobre el pueblo palestino” y la urgente necesidad de salir de la crisis climática avanzando hacia la transición energética.
Y ambos temas los hiló en su primera intervención ante líderes del mundo que asisten a esta conferencia para intentar acuerdos que permitan la reducción efectiva de emisiones de CO2, que para el presidente Petro se pueden medir en términos de desigualdad social: entre más rico es un país más contamina, pero las consecuencias, según dijo, recaen en los países pobres.
Afirmó que lo ocurre con Palestina es una consecuencia desatada por la crisis climática. “¿Están desconectados estos hechos o podemos mirar allí un espejo del inmediato futuro?”, se cuestionó. En sus ya reconocidos giros discursivos y apelando a la historia, aseguró que “Hitler está golpeando las puertas de los hogares de la clase media europea y norteamericana y muchos ya lo han hecho entrar. El éxodo (de migrantes) será respondido con muchísima violencia, con la barbarie misma. Lo que vemos en Gaza es el ensayo del futuro”. Esto traería consecuencias no solo en el éxodo de los pueblos del sur, sino en sus sistemas democráticos, aseguró.
Para Petro todos estos males se generan en la necesidad de sostener el capitalismo fósil. “Hoy se emite un 12% más de CO2 en el mundo que en el 2010. Es decir, los sectores más ricos de la humanidad han expandido su consumo de carbono y por tanto las emisiones de CO2, llevando a la humanidad y a la vida a la crisis”.
El presidente aseguró que el capital privado no se esfuerza por superar la crisis climática porque esta no se mide en rentabilidad, razón por la cual el salvavidas debe llegar desde lo público, con dineros públicos.
“¿Qué proponemos? Algo que ya se hizo en el covid. Que se pueda emitir, de manera universal, Derechos Especiales de Giro, con el fin de disminuir la deuda y aumentar el espacio fiscal de cada Estado. Unos tendrán más, otros menos, pero tendremos más capacidad de financiar algo que yo llamo el ´Plan Marshall´ de inversiones en energías limpias, en transición energética y productiva que nos permita solucionar el problema”, precisó.
Este instrumento de canje de deuda pública por acción climática, indicó, es “una decisión política”.
En su exposición en el panel, el presidente Gustavo Petro consideró que “en África y América del Sur está el gran potencial de la energía limpia. No se puede repetir la historia del petróleo y del carbón, sino que tiene que ser la base de una prosperidad social descarbonizada a escala universal”.
Colombia, en plan conquista
Ya en la parte menos formal de los discursos, Colombia estuvo bajo la mirada de los asistentes y los cientos de visitantes de Dubái con la proyección de uno de los videos promocionales de la marca país, en el edificio más alto del mundo, el Burj Khalifa.
En ‘Colombia, el país de la belleza’ se proyectaron imágenes del café como potencial comercial del país, pájaros y flores y algunos de los sitios emblemáticos para impulsar el turismo sostenible.
“Es llevar el corazón de Colombia al corazón del mundo”, afirmó Petro, quien estuvo acompañado por la primera Dama Verónica Alcocer, por la directora del DPS Laura Sarabia y el ministro de Comercio y Turismo, Germán Umaña.
Además se ubicó un stand para promover la marca país y facilitar los diálogos con inversionistas en cinco proyectos turísticos especiales, entre ellos uno en La Guajira para recuperar las salinas de Manaure en asocio con las comunidades indígenas.