En promedio, cada semana en la Amazonía colombiana se deforestan alrededor de 3.700 hectáreas de bosque. Es decir, el equivalente a casi 74 veces la unidad deportiva Atanasio Girardot. Así se desprende de un informe divulgado este martes por la Procuraduría, que concluye que en apenas seis meses se deforestaron en la Amazonía cerca de 88.800 hectáreas de bosque.
Según el ente de control, además de las hectáreas de bosque deforestado, se han construido 1.107 kilómetros de vías ilegales, muchas de ellas dentro o cerca de parques nacionales como Chiribiquete, La Macarena, Nukak, Farallones de Cali y Barí.
En su informe, generado con su herramienta geoestadística tecnológica, la Procuraduría llama la atención por la relación directa entre la apertura de estas vías irregulares, con el avance de los cultivos ilícitos y el crecimiento descontrolado de la frontera agropecuaria, resultados de una medición realizada entre octubre de 2024 y marzo de 2025.
“La deforestación no solo afecta grandes extensiones, sino también numerosos pequeños parches, como la aparición de nuevos frentes de tala y ocupación en zonas críticas en Meta-Mapiripán, Llanos del Yarí, norte del Chiribiquete, Vistahermosa-Puerto Rico y Putumayo-Caquetá, con altos niveles de pérdida de bosque”, declara el ente de control.
De acuerdo con el Ministerio Público, en el río Naya, entre el Valle del Cauca y Cauca, hay dos vías que avanzan hacia el Parque Nacional Natural Farallones de Cali, “las cuales inician desde Puerto Merizalde y El Despunte, y que se estarían uniendo para formar una ruta hacia el Pacífico, facilitando actividades ilegales como la minería y el narcotráfico”.
Así mismo, en Mapiripán (Meta), se identificaron 263 kilómetros de vías ilegales cruzando veredas como Sabanas de San Ignacio y Anzuelo. “Esta red vial está asociada a una deforestación de más de 13.700 hectáreas. En Vista Hermosa y Puerto Rico, también se detectó una red vial dentro del Parque Nacional Sierra de La Macarena, con pérdida de 7.425 hectáreas”, agregó.
Inclusive, en Guaviare, puntualmente en los municipios de El Retorno, Miraflores y Calamar, se reportaron 208 kilómetros de presuntas vías ilegales y más de 10.400 hectáreas deforestadas, afectando directamente la Reserva Natural Nukak y zonas cercanas al Chiribiquete.
“En los Llanos del Yarí y norte del Chiribiquete se perdieron más de 15.700 hectáreas, destacando la vía Puerto Cachicamo-La Tunia, que atraviesa el Parque Nacional Serranía de Chiribiquete. También se documentó un núcleo de deforestación en la vereda San Antonio, con 726 hectáreas y 22 km de vías ilegales dentro del parque”, concluye el informe.
Por todo ello, la Procuraduría pidió a gobernaciones, alcaldías y autoridades ambientales información sobre las medidas adoptadas en la Amazonía colombiana, exhortando a acciones inmediatas y concretas para frenar estas vías, aplicar cierres administrativos y promover labores de prevención, control y restauración.