El mundo de las artes escénicas de Medellín está de luto: el sábado 29 de marzo Álvaro León Pérez Patiño murió tras ocho días de cuidados hospitalarios en la Clínica de Las Vegas. Recordado por sus colegas y estudiantes por su gran sonrisa y su disposición a la enseñanza, Álvaro León tuvo un accidente el viernes 21 de marzo mientras daba una clase en el Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid.
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Nacido en Bello en 1969, Álvaro León fue Maestro en Arte Dramático en la Universidad de Antioquia y se especializó en técnicas circenses en la Escola Nacional de Circo de Río de Janeiro (Brasil). A lo largo de su carrera fue actor –con una participación en la serie Higuita, de 1996, y participó en el videoclip de la Orquesta Los Bárbaros– cuentero, fundador de Aeroteatro. Además, fue uno de los integrantes con mayor tiempo en el Circo Medellín.
Muchos de los nuevos trabajadores del mundo circense fueron estudiantes de Álvaro León, que ejerció la docencia en varias instituciones, entre ellas la Universidad de Antioquia, el SENA, y la Academia de Danza Aérea Kuaile.
Las giras por Centroamérica, Suramérica y Europa lo convirtieron en un embajador del circo antioqueño.
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¿Qué fue lo que pasó?
El circo es, por naturaleza, una disciplina peligrosa, y aunque en el mundo de las acrobacias y las alturas se toman todas las precauciones posibles, en ocasiones el riesgo se convierte en un destino inevitable. Esta vida al borde de la muerte la resumió el mimo clown Carlos Álvarez con una expresión con la fuerza del poema: “El circo es redondo para que la muerte no se pueda ocultar”.
Consultada por EL COLOMBIANO, la oficina de comunicaciones del Politécnico expresó su pesar por la muerte del artista, al tiempo que señaló que las autoridades adelantan las investigaciones del caso.
El legado del artista
“Álvaro León Pérez Patiño fue un ser excepcional, un maestro del arte y la enseñanza cuya vida estuvo marcada por la entrega y la pasión. Su impacto en la comunidad teatral y circense de Medellín es imborrable”, dijo Carlos Álvarez. Además, recordó la importancia de Álvaro León en los momentos fundacionales del Circo Medellín y su trabajo a favor de las comunidades más vulnerables.
“Lo conocí hace más de 20 años, cuando trabajamos con el sacerdote español Rubén Sánchez. En esos años el sacerdote nos llamó para que con el arte evitáramos que los actores del conflicto reclutaran a los muchachos. Yo invité a Álvaro y a Eva, que asumieron ese compromiso sin cobrar un sueldo. Cuando la comunidad religiosa a la que pertenecía se llevó al padre Rubén, nosotros fundamos el Circo Medellín. Desde entonces Álvaro estuvo con nosotros. Su última función con nosotros fue la del domingo 15 de marzo”, rememora Carlos Álvarez.
Álvaro se casó con la artista belga Eva Boddez y con ella tuvo a Libertad y a Selva.
