Aun cuando en su apretada agenda figuran proyectos del calibre de la reforma a la salud, la reducción de salarios de parlamentarios o el que da vía libre al transfuguismo, en el Congreso decidieron que esta Semana Santa también será de descanso, ocio y –por qué no– también de oración y reflexión.
Por acuerdos entre las distintas bancadas, los congresistas resolvieron que esta semana no sesionarán entre lunes y miércoles, y retomarán labores solo hasta el próximo lunes 21 de abril. Incluso, en el caso de la Cámara, los representantes agendaron ese lunes como día de la familia, por lo que formalmente trabajarán de nuevo hasta el martes 22 de abril.
El descanso durante los días hábiles de Semana Santa, según argumentaron desde el Capitolio, responde también a un acuerdo que se alcanzó con los sindicatos y trabajadores, quienes repusieron este tiempo al extender su jornada laboral entre febrero y abril, con horarios hasta las 6:00 de la tarde.
En el caso del Senado, de acuerdo con la Dirección General Administrativa, el descanso remunerado para los trabajadores y miembros de las unidades de trabajo legislativo (UTL) se dio “con el fin de fortalecer los valores en familia durante la Semana Santa”. Por su parte, en Cámara lo atribuyeron a “programas de bienestar social”.
“Adicionalmente, atendiendo el Acta Final de Acuerdo Sindical del 8 de abril de 2024, se concede el día lunes 21 de abril de 2025 como día de la familia del primer semestre (...) con el propósito de que todos los funcionarios y funcionarias disfruten de este tiempo en paz y armonía junto a sus seres queridos, contribuyendo al bienestar de todos los servidores de la Cámara”, precisó la División de Personal.
Con todo, se espera que la próxima semana –arrancando con audiencias públicas– la Comisión Séptima del Senado retome el debate de la reforma a la salud, uno de los proyectos del corazón del petrismo que sigue su trámite en el Parlamento.
Además, el ministro del Interior, Armando Benedetti, confirmó que después de Semana Santa el Gobierno Nacional presentará formalmente al Congreso la solicitud para convocar a la consulta popular, con la que el presidente Gustavo Petro busca presionar el trámite de sus reformas sociales, particularmente, la fallida reforma laboral.
Benedetti reveló días atrás la plataforma digital creada para que los ciudadanos sugieran preguntas al cuestionario que sería llevado a las urnas, se incluirá una pestaña para que los ciudadanos puedan ponerse en contacto con los senadores y presionar el mecanismo.
“(En el sitio web) se explica el por qué la consulta, cuál es la convocatoria y también van a estar las direcciones de todos los senadores para que la ciudadanía se contacte con el senador por el cual votó en algún momento y le pregunte si está de acuerdo o no con la consulta. Está por orden alfabético”, explicó el ministro.
De acuerdo con Benedetti, además de que los ciudadanos propongan sus preguntas, el objetivo es que puedan contactar al senador por el que votaron. En esa línea, el ministro Sanguino señaló que “de lo que se trata es que los ciudadanos le pidan a los senadores, en particular a aquellos por los que votaron, que no le pongan mordaza a la consulta y se les permita a los ciudadanos y ciudadanas expresarse en la consulta popular”.
El ministro del Trabajo negó que se trate de una forma de presionar al Congreso y que los senadores no son dioses del Olimpo. “No puede ser que cualquier cosa que se le diga a un congresista sea una presión. Es que ellos no son dioses del Olimpo. Ellos son ciudadanos que representan a otros ciudadanos. Y los ciudadanos que son los originarios de su mandato tienen el derecho de ejercer esa voz cuando consideren que sea necesario”.