El presidente Petro anunció que firmará esta semana el decreto de la consulta popular, pese a que el Congreso la negó y su propio ministro del Interior plantea que el Gobierno debe emitir el decreto el 12 de junio.
No cesa la controversia tras el anuncio del presidente Gustavo Petro de convocar por decreto la fallida consulta popular que el Senado negó por mayoría el pasado 14 de mayo. En medio de la polémica, este miércoles quedó al descubierto otro frente de disputa alrededor de los tiempos para convocar al mecanismo.
El embrollo es el siguiente. Durante la alocución televisada de este martes, el jefe de Estado manifestó que esta misma semana firmará el decreto de la consulta popular y que contempla hacerlo frente a la ciudadanía en Cali o Medellín.
“El decreto de la consulta popular se debe firmar ante el pueblo, ojalá ante centenares de miles de personas. Nació del pueblo, se mantiene en el pueblo y es en esta semana, no tenemos mucho tiempo para citar, ya hemos hecho Bogotá y Barranquilla, que dijeron que porque dieron refrigerio se llenó la plaza hasta las 8:00 de la noche. Entonces, ¿dónde lo hacemos ahora? Cali o Medellín”, dijo el jefe de Estado.
No obstante, otros son los cálculos del ministro del Interior, Armando Benedetti, quien sostuvo que solo hasta el 12 de junio el Ejecutivo podría promulgar el decreto.
“Tenemos hasta el 12 de junio, ¿por qué? Porque la ley dice que si el Congreso no se pronunció, habría que esperar ocho días. Si usted cuenta días hábiles da hasta el 12 de junio y el Gobierno hasta ese día tendrá para sacar el decreto para convocar el día de elecciones y así va a ser”, manifestó.
Frente a ello, teniendo en cuenta que el pasado domingo 1 de junio venció supuestamente el plazo para que el Senado se pronunciara, Benedetti manifestó que “ya hay un borrador” y que ayer en Casa de Nariño el documento fue estudiado por exmagistrados de la Corte Constitucional.
Según la tesis del Gobierno –que en la práctica implica desconocer el hundimiento de la consulta por parte de la plenaria el 14 de mayo–, hubo un error de procedimiento y previo a la votación que en efecto se surtió, era necesario leer una proposición con la solicitud del Gobierno. Citando la Ley Quinta –que regula el proceder del Congreso–, Benedetti insistió en que dicha proposición no se leyó, lo que implica que el Senado supuestamente no se pronunció.
Además, el Gobierno reclama que el presidente del Senado cerró la votación de manera rápida y abrupta, por lo que supuestamente impidió la participación de tres congresistas, a lo que se suma que el secretario de la Corporación presuntamente cambió el sentido del voto del senador de oposición Édgar Díaz (Cambio Radical) cuando ya se había cerrado la votación.
Benedetti afirmó que, por ahora, el Gobierno está en la argumentación del decreto que convocaría a las urnas, insistiendo en que detrás hay varias razones, como “la cantidad de ilegalidades, jugaditas, trampas y fraudes que pasaron en el Senado de la República ese 14 de mayo”. En esa línea, sostuvo que el decreto podría estar listo la otra semana, puntualmente el 12 de junio.
El presidente sostuvo que “la mayoría del pueblo de Medellín está con la consulta popular. El pueblo trabajador no va contra sus intereses ni bobos que fueran. ¿Cómo se van a oponer a que las mamás tengan bono pensional? Son buenos hijos”.
Petro dejó encargados a sus ministros para que definan la ciudad este mismo miércoles. “Mañana tiene que definirse el día que firme delante del pueblo la convocatoria a la consulta popular. Mañana se anuncia al público en dónde nos reunimos”, agregó.
