Hace algunos días, se conocieron pantallazos de unos mensajes que recibieron por lo menos seis adolescentes de un colegio privado de parte de una persona desconocida que se presentó como miembro de una “agencia de acompañantes prepago y contenido para adultos”. Las invitaba a vincularse con el fin de “atender ejecutivos y extranjeros, personas de alto nivel, de forma presencial y virtual” a cambio de dinero y otros incentivos.
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El tema causa alerta porque es a todas luces una forma de captar víctimas de explotación sexual comercial de niñas, niños y adolescentes (Escnna), un delito que sigue ocurriendo en todas las comunas de Medellín y en los demás municipios del Valle de Aburrá y otros de Antioquia, según los expertos en el tema.
Las plataformas digitales y las redes sociales son solo uno de los escenarios, que ha tomado fuerza, eso sí, por medio de los cuales se atrapa a las víctimas en este delito que atenta contra todos los derechos de los menores de edad, pero no es la única modalidad existente. Solo por poner un ejemplo, también se sigue dando la invitación directa, en ocasiones de parte de otros menores de edad que primero fueron víctimas y luego son utilizados para conseguir más niñas, niños y adolescentes con el fin de explotarlos.
Es un problema al que se le ha puesto mucha más atención desde el año pasado en Medellín, pero sigue ocurriendo. Entre enero de 2024 y el 30 de abril de 2025, la Unidad de Niñez de la Secretaría de Inclusión Social del Distrito atendió 167 niñas, niños y adolescentes presuntas víctimas de este delito, de las cuales 39 corresponden a este año.
Niñas y adolescentes mujeres siguen siendo la mayoría de víctimas
Entre algunas características de los menores de edad que ha atendido la Unidad de Niñez desde el año pasado se encuentra que la mayoría de víctimas corresponde a mujeres, del total de casos del año pasado, 112 de las víctimas fueron niñas o adolescentes mujeres, es decir, el 87,5%. Pero es un delito que también afecta a los niños y adolescentes hombres, por lo cual no se pueden perder de vista al combatir este delito.
Asimismo, de los casos atendidos en 2024, el 14,1% (18) de las víctimas tenía entre 10 y 12 años, mientras que el 85,2% (109) se encontraba entre los 13 y 17 años; para los restantes no se cuenta con dato registrado. Respecto a la nacionalidad, el 87,9% (109) correspondió a menores de edad colombianos, el 9,7% (12) a venezolanos y el resto no reportó esta información.
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Durante 2025, con corte a abril, de las 39 niñas, niños y adolescentes presuntas víctimas de explotación sexual, el 76,9% (30) fueron mujeres y el 23,1% (9) hombres. En cuanto al rango de edad, el 20,5% (8) tenía entre 11 y 12 años, mientras que el 79,5% (31) se encontraba entre los 13 y 17 años. Respecto a la nacionalidad, el 99% correspondió a personas colombianas.
Los casos que ingresaron a la Alcaldía de Medellín, por medio de la Unidad de Niñez se conocieron por medio de distintos canales que forman parte de rutas integradas de protección a esta población. La mayoría de ellos llegan tras ser identificados por los equipos profesionales de la dependencia en su trabajo de campo o mientras cumplen estrategias de prevención; en segundo lugar llegan remitidos por autoridades administrativas en procesos de protección o restablecimiento de derechos; y en tercer lugar ingresan por medio de canales como PQRSD.
Una vez ingresan a la Unidad de Niñez, son atendidos según las particularidades de cada uno bajo diversas modalidades. Hay centros transitorios que funcionan las 24 horas del día y que acogen a niños, niñas y adolescentes que han tenido vida en la calle o riesgo inminente; allí les ofrecen servicios para sus necesidades básicas, atención psicosocial y los vinculan a rutas de protección.
Otras de las víctimas reciben atención especializada en violencias sexuales, que se brinda por medio de asistencia técnica, acompañamiento psicosocial y restablecimiento de derechos y se articulan con el sistema de justicia y salud. Y otros más son atendidos por problemas asociados a la permanencia en calle, por lo cual reciben atención inmediata y temporal para garantizar su protección, contención emocional y activación de rutas de restablecimiento de derechos.
Dentro de estas estrategias de atención también está el proyecto de acompañamiento familiar, “que busca fortalecer las capacidades de las adolescentes, sus familias y redes de apoyo mediante procesos pedagógicos, psicosociales y comunitarios que promueven su desarrollo integral, prevención de vulneraciones y sostenimiento en el entorno protector”, indicaron desde la Unidad. Pero también hay algunos menores de edad que reciben atención complementaria en la jornada alterna a la escolar, con actividades pedagógicas y recreativas que buscan que no se salgan de los colegios y estén en sus entornos familiares.
Justamente, este miércoles se espera conocer detalles de la visita que el alcalde Federico Gutiérrez hará a Estados Unidos para tratar el tema de la explotación sexual comercial de menores de edad, teniendo en cuenta que algunos de los victimarios son extranjeros. Asimismo, se conocerán datos sobre la captura de seis personas en dos casos diferentes: el primero, por pornografía con menores de 18 años; y el segundo, por acto sexual y estímulo a la explotación sexual.
El llamado a la ciudadanía es a no quedarse callada nunca ante los hechos de Escnna. Hay un rol clave en la sociedad, los hoteleros, transportadores, comerciantes, medios de comunicación, ciudadanos de a pie. Todos están llamados a denunciar a tiempo cualquier evidencia o sospecha de explotación sexual comercial de niñas, niños y adolescentes, a través del 123, el 141 del Icbf y el 122 de la Fiscalía.
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