En uno de los movimientos empresariales más relevantes del sector minero colombiano, la multinacional australiana South32 anunció que llegó a un acuerdo para vender su operación de Cerro Matoso, en Córdoba, a una subsidiaria del conglomerado industrial CoreX Holding B.V., fundado en 2024 por el empresario turco Robert Yüksel Yildirim.
La operación se dará mediante una contraprestación inicial nominal y posibles pagos futuros de hasta 100 millones de dólares. Luego, CoreX asumirá el control económico y operativo de la minera, incluidos todos los pasivos actuales y futuros.
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De esta manera, la estructura de pagos futuros se divide en dos. En primer lugar, 80 millones de dólares en contraprestación vinculada al precio basada en la producción y los precios del níquel. En un segundo momento, 20 millones de dólares relacionados con permisos para el proyecto Queresas & Porvenir North durante los próximos cinco años.
La transacción, que se concretará hacia finales de 2025 tras cumplir los trámites regulatorios internacionales, representa un cambio de timonel en una operación clave para el país, con más de 43 años de trayectoria en la producción de ferroníquel y una huella socioeconómica profunda en el sur de Córdoba.
Tras la venta de Cerro Matoso, la minera australiana South32 dejará de reportar esta operación como parte de sus negocios principales y registrará una pérdida contable cercana a 130 millones de dólares en sus resultados del año fiscal 2025. Esta cifra será tratada como un ajuste especial y no afectará sus ganancias operativas habituales.
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¿Quién es CoreX, el nuevo dueño de Cerro Matoso?
CoreX es un conglomerado industrial joven pero de rápido crecimiento, presente en 55 países, con más de 20.000 empleados y operaciones en sectores que van desde metales y minería hasta energías renovables, logística portuaria, infraestructura, productos químicos y capital de riesgo.
En el negocio minero, CoreX es un jugador global clave en la producción de cromita y ferrocromo, y ha puesto su mirada en el níquel, un mineral estratégico para la transición energética mundial.
Así lo demuestra su reciente adquisición de la Compagnie Minière du Bafing en Costa de Marfil y sus inversiones en Macedonia del Norte y Kosovo.
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“La compra de Cerro Matoso es un paso clave para convertirnos en un proveedor global totalmente integrado de níquel, comprometido con el desarrollo sostenible y las comunidades locales”, afirmó Robert Yüksel Yildirim, fundador y CEO de CoreX.
South32 prioriza cobre y zinc, deja atrás el níquel colombiano
South32 inició en diciembre de 2023 una revisión estratégica de Cerro Matoso, motivada por los cambios estructurales en el mercado global del níquel y la necesidad de enfocar su portafolio en minerales con mayores márgenes, como el cobre y el zinc, claves en la transición energética global.
“La operación en Cerro Matoso tiene potencial, pero ya no encaja dentro de nuestras prioridades de inversión”, explicó Graham Kerr, CEO de South32.
Agregó: “Confiamos en que CoreX aportará una visión de crecimiento a largo plazo, manteniendo el compromiso con los empleados, las comunidades y el entorno ambiental”.
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South32, con presencia en Australia, Sudáfrica y Sudamérica, continuará reorientando su portafolio hacia operaciones de mayor rentabilidad y alineadas con las tendencias globales de sostenibilidad.
Es decir, la operación está en línea con la estrategia de la compañía, que busca concentrarse en negocios más rentables ligados a minerales clave para la transición energética global, mientras fortalece su balance y gana más capacidad financiera para invertir en proyectos de cobre y zinc, sectores donde ve oportunidades de crecimiento.
El futuro del níquel colombiano, en manos de un nuevo jugador global
La transición será gradual y contará con la colaboración estrecha entre South32, Cerro Matoso y CoreX, buscando una entrega ordenada y responsable de la operación.
Según el comunicado oficial, el cambio de propiedad no implica riesgos para la seguridad laboral, la salud de los trabajadores o los compromisos legales y ambientales adquiridos por Cerro Matoso.
Actualmente, Cerro Matoso beneficia a más de 50.000 personas en el sur de Córdoba, genera cientos de empleos directos e indirectos y mantiene un diálogo permanente con 25 comunidades vecinas, con las que ha ejecutado más de 400 proyectos sociales, enfocados en vivienda, educación, acceso a tierras y desarrollo productivo.
La empresa dijo en su pronunciamiento oficial que continuará operando con normalidad mientras se concreta la transacción, enfocándose en cumplir sus metas de producción, optimizar costos y mantener la seguridad operacional.
La operación de Cerro Matoso es una de las principales productoras de ferroníquel en América Latina, material clave en la industria del acero inoxidable y, cada vez más, en la fabricación de baterías para vehículos eléctricos.
Con esta adquisición, CoreX se consolida como un actor relevante en el negocio global del níquel, apostando por una cadena de suministro integrada, desde la extracción minera hasta la comercialización internacional. La compra refuerza su presencia global, donde ya controla activos en África, Europa del Este y ahora América Latina.
Tanto South32 como CoreX coincidieron en que la transición se hará respetando los principios de sostenibilidad, responsabilidad social y fortalecimiento económico de la región. La operación está sujeta a la autorización de las autoridades internacionales de competencia, un proceso que podría tardar varios meses.
“Crecemos con un propósito claro: fortalecer la cadena de valor del níquel y apoyar a las comunidades donde operamos, con integridad y transparencia”, reiteró Yildirim, quien en poco más de un año ha logrado posicionar a CoreX como uno de los conglomerados emergentes más ambiciosos del sector minero global.
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