Chelsea selló este viernes su boleto a las semifinales del Mundial de Clubes con una agónica victoria 2-1 sobre el Palmeiras de Richard Ríos, en un duelo marcado por el drama, los errores y una despedida con sabor agridulce.
En el Lincoln Financial Field abarrotado por más de 65 mil espectadores y en medio de la celebración del 4 de julio, los dirigidos por Enzo Maresca arruinaron el sueño brasileño y ahora enfrentarán a Fluminense por un cupo en la gran final del 13 de julio.
Con un inicio dominante (69% de posesión en el primer tiempo), los londinenses tomaron ventaja al minuto 16 gracias a una brillante jugada de Cole Palmer, que definió con clase tras el pase de Liam Delap. Palmeiras, aturdido por el gol, apenas logró reacomodarse, extrañando a varios de sus defensores titulares y resistiendo a los golpes de un Chelsea que no perdonaba entre líneas.
Pero en la segunda mitad, el equipo de Abel Fereirra resurgió. Richard Ríos habilitó a Estêvão, quien con apenas 18 años y a punto de incorporarse, precisamente al Chelsea, empató el partido con una joya de gol al 53´. El joven brasileño se desquitó del dominio del rival con velocidad, potencia y un derechazo que venció a Sánchez tras rebotar en el travesaño. La celebración fue efusiva, aunque su anotación estaba hiriendo al club que pronto defenderá.
Cuando todo apuntaba a que el encuentro se iría al tiempo extra, una jugada desafortunada marcó el destino del duelo. Al 83’, un entro aparentemente inofensivo de Malo Gusto, desviado por Giay terminó en un autogol del arquero y capitán Weverton, quien no pudo reaccionar a tiempo. “Estaba listo para ir por la pelota, pero el desvío me descolocó. Ya no hay nada que hacer, salvo mirar hacia adelante”, dijo Weverton con frustración.
Abel Ferreira, sin excusas, felicitó al Chelsea y reconoció que el planteamiento de Maresca los sorprendió en el primer tiempo. “Nos costó frenar a Palmer entre líneas. Corregimos en la segunda parte y empatamos bien, pero es difícil asimilar un autogol así”, lamentó el técnico portugués.
Con esta victoria, los “Blues” mantienen vivo el sueño de conquistar el Mundial de Clubes y se medirán el próximo martes ante Fluminense. La segunda llave de semifinal la disputarán los ganadores de los partidos del PSG vs Bayern Munich y del Real Madrid vs Borussia Dortmund.